Como todo el mundo que vive en pisos sabe, con asegurar la casa propia no se queda todo el edificio asegurado. Están esas que se llaman las zonas comunes: los rellanos, el portal, el cuarto de la caldera… ¿Deben asegurarse? Pues la verdad es que sí. Las comunidades de vecinos, en realidad, precisan más aseguramiento que las casas. Piénsalo: tu casa la usas tú, pero las zonas comunes las usa todo el mundo. De hecho, el seguro de comunidades de vecinos, que es específico, es uno de los escasos seguros en los que hay más percances que contratos.
En España, entre viviendas y comunidades de vecinos, hay edificios asegurados por un valor de, párate a leer la cifra, 3.863.420.941.302 euros. Sí, como lo has leído: casi cuatro billones de euros. ¿Es un aseguramiento caprichoso? De ninguna manera. En el caso de los edificios, el seguro de comunidades de propietarios es fundamental para garantizar la tranquilidad de los vecinos sobre todo lo que pase en las zonas comunes. Los productos varían mucho, pero hay algunas cosas que siempre hay que tener en cuenta.
Las coberturas del seguro de propietarios
Desde ya te decimos que, si el seguro de tu comunidad no tiene cobertura de goteras, estás en peligro inminente. El problema más habitual en los edificios tiene que ver con las filtraciones o roturas de las canalizaciones comunes. Sí, eso que los vecinos suelen identificar usando la expresión la bajante. De hecho, no es por nada, pero si eres presidente de la comunidad, lo primero que deberías preguntarte es cuántos años tienen tus conducciones. Porque en la respuesta encontrarás muchas claves sobre si vas a tener o no quebraderos de cabeza durante tu mandato. En toda España, que lo sepas, las goteras en conducciones comunes cuestan 650.000 euros al día.
Cobertura de cristales
Otra cosa que no se te puede olvidar es una buena cobertura de cristales. La cobertura de cristales, aunque no se ve (chiste malo), es muy importante porque las roturas de cristales son tan frecuentes que hay una cada siete minutos en alguna comunidad asegurada de España. Si te paras a pensarlo, muchas zonas comunes tienen mucho cristal y, la verdad y para qué negarlo, la gente no cuida igual los cristales que son de todos que los que son sólo suyos.
Las principales coberturas de los seguros para comunidades de propietarios son las goteras, los cristales, la responsabilidad civil y la defensa jurídica.
Responsibilidad Civil
Como tercera gran cobertura que no debes olvidar en el seguro de una comunidad de propietarios es la responsabilidad civil. Muchas comunidades tienen escaleras, y por las escaleras se puede esnafrar el personal. En determinadas circunstancias (por ejemplo, si cedió un peldaño que estaba ya desgastado), la comunidad puede ser responsable de los daños causados, y ya podéis poneros a gritar eso de: ¡derrama, derrama! En este punto, créelo, es mucho mejor prevenir que lamentar.
Pero, ¡hay más!
Muy apegada a la responsabilidad civil está la cobertura de defensa jurídica, que nos permitirá acceder a abogados especializados cuando tengamos pleitos y querellas. Y no hay que olvidar, desde luego, los robos.
Esto es sólo una pequeña lista de coberturas. Los seguros de comunidades de propietarios también cubren fenómenos atmosféricos, averías eléctricas, protecciones relacionadas con el empleado de la finca, y otras muchas. No te olvides de repasarlas bien, y no dejarte ninguna importante fuera. Que la presidencia no te quite el sueño.