El seguro de salud se ha hecho un hueco importante en nuestra vida. Aún en una sociedad que cuenta con un sólido sistema de salud público. Cada vez más gente apuesta por contratar un seguro médico privado que sirva como complemento a estos servicios gratuitos que ofrece la sanidad estatal.
Gracias a los comparadores de seguros de salud cada día es más fácil encontrar una póliza que se adapte a nuestras necesidades en coberturas y precios. Lo que resta desde aquí es analizar las implicaciones fiscales de esta decisión.
¿Es posible desgravar el pago de estas primas?
La fiscalidad de los seguros no contempla ningún tipo de deducción en el IRPF para el seguro médico privado, si bien existe una excepción. Los trabajadores autónomos que suscriban el seguro de salud como alternativa al Régimen Estatal de los Trabajadores Autónomos o RETA sí podrán deducir las primas que paguen por su seguro hasta un máximo de 4.500 euros.
Y es que para los trabajadores autónomos el seguro médico sí representan un gasto deducible hasta el punto que podrán destinar hasta un máximo de 500 euros para el pago del seguro de salud y reducir así la factura fiscal. Los trabajadores por cuenta propia podrán, incluso incluir dentro de esta cantidad el seguro familiar que también cubra al cónyuge y los hijos menores de 25 años.
Tributación
La tributación del seguro de salud cambia radicalmente cuando nos referimos al seguro de empresa y al Impuesto de sociedades. En este caso, la compañía podrá integrar como gasto deducible las primas que paguen a los trabajadores, algo que también pueden hacer los trabajadores autónomos con su seguro médico, tanto si tributa
Para el empleado no tendrán consideración de retribución en especie los pagos del seguro de salud por parte de la empresa que no superen los 500 euros, como ocurre también en el caso de los autónomos. Si se supera esa cantidad, el exceso tributará como retribución en especie, integrándose en las rentas salariales del empleado.